martes, 5 de octubre de 2010

Guatemala

Hola a todos/as desde la Colonia Gerardi…

Después de un mes y medio en Guatemala hemos conseguido ponernos a escribir para compartir con vosotros/as un poquito sobre el país chapín. La verdad es que resulta muy difícil traducir a las palabras, el montón de sentimientos, sensaciones y experiencias que estamos viviendo. Así que empecemos por el principio…

La Colonia es un lugar tranquilo situado a unos 18 km de Guatemala capital, y cuenta con unas 155 familias (según Pika, Douglas y el Conejo… unos “cuates”). Nuestra función aquí es principalmente reforzar a los niños/as en la escuela y abrir por la tarde la biblioteca, la cual combinamos con ludoteca. Pero también participamos y apoyamos el grupo de mujeres. Ahora que acaban las clases vamos a centrarnos en el ocio y el tiempo libre y en lo que llaman “escuela de verano” (a pesar de que vamos hacia el frío).

Nuestra casita es como todas: dos habitaciones, un baño con agua tres días a la semana, cocinilla, una mesa y la pila para fregar en el patio trasero. Eso sí, mires donde mires hay verde. Árboles, árboles, y más árboles… un paraíso natural a veces empañado por la basura tirada en plena calle, pero maravilloso!! Nuestro despertador son los gallos mañaneros, la música a tope de los vecinos nuestra mejor compañía, ir en esos autobuses amarillos de más de 15 años en plenos barrancos toda una aventura y la gente… la gente es Guatemala. La amabilidad, la generosidad y la humildad describen casi a la perfección lo que estamos recibiendo de las personas que nos hemos ido encontrando, sin obviar la realidad de delincuencia organizada en maras y demás. La otra cara de la preciosa Guatemala.

Hemos compartido con la gente ilusión, ideas, otra manera de vivir, la tortilla de patata… pero estamos recibiendo clases de costura, frijoles, historias de vida que jamás imaginamos y lo que más nos gusta: millones de sonrisas, de abrazos, de postales… en definitiva, de amor…

Así que nos despedimos hasta otra… ahora tenemos que seguir disfrutando y aprovechando todo lo que nos rodea… que es mucho más de lo que imaginamos...

Esti, Marta y Eva